Existe un mundo lleno de vida en el interior de la tierra

Es fascinante pensar en la posibilidad de que exista un **** en el interior de la Tierra, lleno de vida animal, vegetal y civilizaciones antiguas. Las leyendas transmitidas por los **aborígenes del Amazonas** a lo largo de generaciones nos invitan a imaginar un reino subterráneo, un lugar donde la realidad se entrelaza con la fantasía.

En este enigmático mundo, quizás los árboles crecen en la penumbra, sus hojas brillando como joyas. Tal vez criaturas desconocidas recorren pasadizos secretos, y las paredes de las cavernas guardan inscripciones de sabiduría ancestral. ¿Qué historias se tejen en las profundidades de la Tierra ¿Qué civilizaciones florecieron antes que la nuestra, ocultas bajo la superficie?

Aunque la ciencia actual no respalda estas leyendas, no podemos descartar por completo la posibilidad de lo desconocido. La Tierra sigue siendo un misterio en muchos aspectos, y las historias transmitidas oralmente a menudo contienen fragmentos de verdad y maravilla. Así que, ¿quién sabe qué secretos aguardan en las entrañas de nuestro planeta

Viaje al centro de la Tierra

La idea de un “Viaje al Centro de la Tierra”, como la planteada en el clásico de Julio Verne, despierta la imaginación y la curiosidad. ¿Y si fuera cierto? ¿Qué nos encontraríamos en ese mundo subterráneo, en las profundidades de nuestro planeta Las leyendas de los nativos Macuxi, que viven en el Amazonas (en países como Brasil, Guyana y Venezuela), sugieren que existe una entrada a la “Tierra interna”.

Según estas leyendas orales, los Macuxi son los descendientes de los hijos del Sol, considerado el creador del Fuego y la enfermedad. Su papel es el de protectores de la entrada a esta misteriosa Tierra interna. Hasta el año 1907, los Macuxi solían entrar en una especie de caverna y viajar durante 13 a 15 días hasta alcanzar el interior. Allí, en el otro lado del mundo, habitan los Gigantes, criaturas que miden alrededor de 3 a 4 metros de altura.

Según las leyendas Macuxi, a los exploradores se les encomendaba la tarea de vigilar la entrada y evitar que extraños ingresaran a la “Tierra hueca”. Los que se aventuraban en la misteriosa caverna descendían por escaleras gigantes, cada peldaño con una longitud de aproximadamente 80 centímetros.

Después del tercer día, dejaban atrás sus antorchas y continuaban su viaje “dentro” de la Tierra, iluminados por las luces ya presentes en las cuevas. Linternas gigantes, del tamaño de una sandía, brillaban como el sol. Y tras 4 a 5 días de viaje, aquellos dentro de la cueva experimentaban una pérdida de peso y masa corporal, lo que les permitía moverse mucho más rápido en este enigmático mundo subterráneo.

Sol interno

Según las leyendas de los pueblos Macuxi, después de 5 días dentro de las cavernas, se adentrarían en enormes cavidades cuyos techos no eran visibles. En una de las cámaras del sistema de cavernas, se encontraban cuatro objetos similares al Sol, imposibles de mirar y cuyo propósito era desconocido para el pueblo Macuxi.

Dentro de la Tierra, existen lugares donde los árboles con alimentos pueden crecer. Los Macuxi afirman que frutas como cajúes, robles, mangos, plátanos y algunas plantas de menor tamaño se encuentran a 6 o 7 días de viaje.

A medida que el pueblo Macuxi se adentraba más en la Tierra, observaban áreas de vegetación más extensas. Sin embargo, no todas las zonas eran verdes y prósperas. Algunos lugares eran extremadamente peligrosos y debían evitarse, como aquellos con piedras hirvientes y arroyos de “azoge”.

Las tradiciones orales Macuxi continúan, y afirman que después de pasar por estas cámaras gigantes, aproximadamente a la mitad del viaje, deben moverse con cuidado debido al misterioso “aire” que puede hacer que las personas “vuelen o floten” a su alrededor.

Continuando su viaje, llegarían a un lugar dentro de la Tierra donde los Gigantes vivían. Allí, los exploradores Macuxi se alimentaban con manzanas del tamaño de cabezas humanas, uvas del tamaño de un puño humano y deliciosos peces gigantes capturados por los propios gigantes, quienes los entregaban como regalos a los Macuxi.

Después de abastecerse con la comida ofrecida por los gigantes, los exploradores Macuxi regresarían “a casa” al mundo exterior, ayudados por los gigantes del mundo interior.

Guardianes del inframundo

Los Macuxi, según sus leyendas, son los guardianes del inframundo y los protectores de la entrada a la Tierra interna. Creen que en el interior de la Tierra existe una tierra llena de increíbles poderes y riquezas. Aunque para muchos esta leyenda es considerada solo eso, otra historia ancestral, para los Macuxi era tan real como cualquier otra cosa. Sin embargo, su papel como protectores llegó a su fin cuando los exploradores británicos se aventuraron en busca de oro y diamantes en el Amazonas, adentrándose en las cuevas y sin regresar jamás.

Desde entonces, los Macuxi afirman que los gigantes los castigarían por no cumplir con sus obligaciones, y las leyendas sobre estos seres colosales se han desvanecido con el tiempo. La idea de la Tierra Hueca también aparece en muchas civilizaciones antiguas y culturas de todo el mundo. La existencia de seres gigantes que habitan nuestro planeta es un tema presente en decenas de mitologías y textos religiosos, como la Biblia.

¿Es posible que las leyendas Macuxi sean reales? ¿Podría existir una entrada a la Tierra interna en algún lugar del Amazonas? Aunque no hay evidencia científica que respalde estas creencias, la idea de mundos ocultos y seres misteriosos sigue fascinando a muchas personas en todo el mundo.