En los últimos años, la hipótesis de los antiguos cosmonautas se ha vuelto un tema popular entre investigadores interesados en investigar acerca del avance tecnológico y desarrollo cultural debido a la influencia alienígena en sociedades antiguas. Aunque la prueba para apoyar esta idea es escasa, hay varios descubrimientos que han llamado la atención de estudiosos, como el hallazgo de objetos antiguos que los humanos de aquella época no estaban capacitados para construir. Esto incluye La Roca de Ica del Perú, La Pirámide de Guiza en Egipto o la Cámara de Los Enigmas situada en Islandia. También hay bastantes referencias a seres extraños registradas en manuscritos antiguos como las Escrituras Hebreas, Los escritos sumer
El ejercito estadounidense tuvo la necesidad de construir bases aéreas en varias islas Desiertas del Océano Pacífico durante la Segunda Guerra Mundial. Los nativos de esa región, que no habían visto nunca artefactos tecnológicos eran extrañamente cautivados por los aviones que volaban sobre ellos y veían eso como una señal divina, casi como si sus dioses hubieran elegido aquel lugar para vivir.
Cuando los habitantes de las vilas primitivas veían la llegada y salida de estos enormes aviones, sus reacciones eran de extrañeza ante lo que para nosotros creemos como algo normal. Pero eso no fue todo, ya que resultaron más impresionados cuando conocieron la mayor sorpresa: los soldados estadounidenses estaban distribuyendo grandes cantidades de alimentos entre la gente como ayuda humanitaria.
Tras la conclusión de la guerra, muchas bases navales del océano Pacífico cesaron sus operaciones y como resultado, los suministros provenientes de esos lugares desaparecieron.
En su afán de detectar la llegada de un nuevo suministro a la isla, las personas que seguían el «culto cargo» desarrollaron actos tradicionales como una simulación de los sonidos del aterrizaje de aeronaves, imitar los movimientos formales hechos por los militares encargados del lugar y cultivar el uso de dispositivos tecnológicos como radios incluso reproducir aviones de madera para intentar atraerlos de nuevo.
Esta peculiar forma de creencias religiosas, llamada «culto cargo«, surgió en regiones remotas que comprendían la Nueva Guinea, Melanesia y Micronesia a principios del siglo XIX. Esto coincidió con el momento en que los primeros europeos llegaron a estas zonas provenientes de los barcos exploradores.
Durante el último siglo, el culto cargo cayó en desgracia y casi desapareció por completo. Uno de los más celebrados es el «culto de Jon Frum» en la isla de Tanna, Vanuatu. Esta religión surgió antes de la Segunda Guerra Mundial y se transformó posteriormente en un culto cargo.
Los expertos en antiguos cosmonautas afirman que es muy probable que los cultos a la «carne en conserva» tengan una relación con el pasado de la humanidad. Esto encaja perfectamente con su teoría, lo cual sugiere que algo similar ocurrió hace mucho tiempo en las sociedades primitivas.
Esta antigua hipótesis plantea el dilema de si los extraterrestres habrían estado en nuestro planeta mucho tiempo atrás y, debido a la falta de conocimientos y tecnología de aquella época, se les podría haber interpretado por los hombres como seres divinos que iluminaron el camino para todas las religiones que existen en nuestro mundo actual.
En 1969, dos personas se convirtieron en los primeros seres humanos del planeta Tierra que caminaron sobre la superficie de la Luna. Esto inicialmente fue algo impensable, una idea descarada para muchos. Sin embargo, el mundo en el que vivimos hoy es muy diferente: todo lo que antes parecía ser solo un sueño ahora está a nuestro alcance gracias a la ciencia.
Si un humano acaba de adentrarse en el espacio con la capacidad de recorrer planetas desconocidos, ¿por qué la posibilidad de que otros seres extraterrestres se presenten en nuestra dimensión no puede ser considerada con confianza
En estos días hay muchas noticias sobre la presencia de Ovnis por todo el mundo, llevando a algunos a plantear una nueva teoría acerca de que los extraterrestres visitaron nuestro planeta en épocas pasadas y fueron adorados como dioses. Por lo tanto, no sería descabellado pensar que existen pruebas ocultas que avalan esta hipótesis. La evidencia siempre ha estado presente, solo nos falta abrir los ojos y la mente para poder verlo.
La pregunta de si (los seres de otros mundos) deberían ser considerados como dioses, podría tener respuesta en el libro más antiguo, La Biblia. Esta es la idea del autor Erich von Däniken quien llevó al best seller “El Retorno de los Dioses”; su fuente de inspiración es su fe en Dios y por ende la Biblia, así que todo se trata de interpretar correctamente aquello que está escrito allí.
Soy cristiano y creo en Dios pero mi Dios todopoderoso jamás necesitaba un vehículo para desplazarse o levantarse en el aire.
Von Däniken pronunció sus palabras a través de un canal de televisión que se enfoca en temas históricos.
El Antiguo Testamento menciona diversas apariciones divinas en la tierra, que iban seguidas de un gran sonido y mucho humo. Por ejemplo, el profeta Ezequiel describe haber observado la llegada de algunos seres celestiales embarcados en una nave voladora. Erich Von Däniken sugiere que este relato del Antiguo Testamento sería una descripción precisa de un encuentro con extraterrestres.
Este es el texto que aparece escrito en la biblia:
» Yo, el sacerdote Ezequiel, hijo de Buzí, estaba un día a orillas del río Quebar,b en Babilonia, entre los que habían sido llevados al destierro. En esto se abrió el cielo, y vi a Dios en una visión. Era el día cinco del cuarto mes del año treinta, cinco años después de que el rey Joaquín fuera llevado al destierro. El Señor puso su mano sobre mí. 4 Entonces vi que del norte venía un viento huracanado; de una gran nube salía un fuego como de relámpagos, y a su alrededor había un fuerte resplandor. En medio del fuego brillaba algo semejante al metal bruñido, y en el centro mismo había algo parecido a cuatro seres con aspecto humano. 6 Cada uno de ellos tenía cuatro caras y cuatro alas; 7 sus piernas eran rectas, con pezuñas como de becerro, y brillaban como bronce muy bruñido. 8-9 Además de sus cuatro caras y sus cuatro alas, aquellos seres tenían manos de hombre en sus cuatro costados, debajo de sus alas. Las alas se tocaban una con otra. Al andar no se volvían, sino que caminaban de frente. 10 Las caras de los cuatro seres tenían este aspecto: por delante, su cara era de hombre; por la derecha, de león; por la izquierda, de toro; y por detrás, de águila.i 11 Las alasj se extendían hacia arriba. Dos de ellas se tocaban entre sí, y con las otras dos se cubrían el cuerpo. 12 Todos caminaban de frente, no se volvían al andar. Iban en la dirección en que el poder de Dios los llevaba. 13 El aspecto de los seres era como de carbones encendidos, o como de algo parecido a antorchask que iban y venían en medio de ellos; el fuego era resplandeciente y de él salían relámpagos. 14 Los seres iban y venían rápidamente, como si fueran relámpagos.l
15 Miré a aquellos seres y vi que en el suelo, junto a cada uno de ellos, había una rueda. 16 Las cuatro ruedas eran iguales y, por la manera en que estaban hechas, brillaban como el topacio. Parecía como si dentro de cada rueda hubiera otra rueda. 17 Podían avanzar en cualquiera de las cuatro direcciones, sin tener que volverse. 18 Vi que las cuatro ruedas tenían sus aros, y que alrededor estaban llenas de reflejos.n 19 Cuando aquellos seres avanzaban, también avanzaban las ruedas con ellos, y cuando los seres se levantaban del suelo, también se levantaban las ruedas. 20 Los seres se movían en la dirección en que el poder de Dios los impulsaba, y las ruedas se levantaban junto con ellos, porque las ruedas eran parte viva de los seres. 21 Cuando los seres se movían, se movían también las ruedas; cuando ellos se detenían, las ruedas también se detenían, y cuando los seres se levantaban del suelo, también las ruedas se levantaban con ellos, porque las ruedas eran parte viva de los seres.ñ
22 Por encima de sus cabezas se veía una especie de bóveda brillante como el cristal.o 23 Debajo de la bóveda se extendían rectas las alas de aquellos seres, tocándose una con otra. Con dos de ellas se cubrían el cuerpo. 24 Y oí también el ruido que hacían las alas cuando avanzaban: era como el ruido del agua de un río crecido,p como la voz del Todopoderoso,q como el ruido de un gran ejército. Cuando se detenían, bajaban las alas. 25 Y salió un ruido de encima de la bóveda que estaba sobre la cabeza de ellos.r 26 Por encima de la bóveda vi algo como un trono que parecía de zafiro,s y sobre aquella especie de trono había alguien que parecía un hombre.t 27 De lo que parecía ser su cintura hacia arriba, vi que brillaba como metal bruñido rodeado de fuego,u y de allí hacia abajo vi algo semejante al fuego. A su alrededor había un resplandor 28 parecido al arco iris cuando aparece entre las nubes en un día de lluvia. De esta manera se me presentó la gloria del Señor.v Al verla, me incliné hasta tocar el suelo con la frente.» [Ez-1,5 27].
Ezequiel expresó su alegría al ver y sentir que describía como «Gloria de Dios». En esta creación descubrió cuatro seres alados con el rostro humano, los cuales se desplazaban en unos artefactos relucientes con forma de ruedas. Esta vista fue complementada por la presencia de una figura que parecía humana sentada en un trono, aparentemente como parte del espectáculo.
Según Ezequiel, los seres que viajaban eran transportados a través de un vehículo hecho de alas que producía un ruido similar a una cascada. Él también describió algo llamado “una rueda en una rueda”, lo cual suena más como la tecnología avanzada de hoy en día más que algo paranormal. Dadas las limitaciones mentales para el pueblo de aquel entonces, esta historia podría tener raíces históricas bajo la interpretación religiosa.
Según la tradición judía, Von Däniken destaca a Enoc como un ejemplo de su idea de que los seres extraterrestres han influido en la historia humana.
Solo hay una referencia de Enoc en el canon bíblico pero lo cierto es que había mayor presencia del mismo en otros documentos del Antiguo Testamento no aprobados oficialmente. Un ejemplo de esto es el «Texto de Enoc» donde se relata que el abuelo del patriarca Moisés fue llevado a los cielos por la divinidad para pasar tres siglos allí.
El relato bíblico menciona que Enoc fue elevado al cielo y encontró a ‘el Altísimo’, una figura que se refiere a Dios en la religión judía. Esta entidad, impregnada de grandeza y gloria, concedió a Enoc el don de hablar su idioma y posteriormente le enseñó la escritura. De esta forma, el joven comenzó la redacción de libros, convirtiéndose así en el primer ser humano del que se tenga noticia que tuvo contacto con seres celestiales, extraterrestres o como sea que les hayamos dado nombre.
Los primeros relatos del pasado que se conocieron fueron contados de viva voz. Estos eran la forma en la que nuestros antepasados narraban lo que veían y escuchaban, con el objetivo de transmitir estos acontecimientos a las generaciones venideras. Desde entonces el lenguaje escrito ha evolucionado mucho, pero ¿por qué algunas personas no creen en estas historias que son tan impactantes y significativas?
Muchas religiones, incluyendo la religión cristiana, contienen historias de seres divinos que descienden a la Tierra con habilidades increíbles. Un ejemplo de esto es el poema mítico védico en el que se narra sobre los «Vímanas», máquinas voladoras controladas por las deidades. Esta es una muestra clara del poder sobrenatural presente en el ámbito religioso.
El Bhagavata Purana contiene muchas narraciones de hace miles de años, y una de ellas es la representación de un soberano llamado Nirga volando en un vehículo fabricado con metal.
Las antiguas leyendas sánscritas muestran registros de los Vímana, unos vehículos aéreos que miden hasta 30 metros de largo y cuentan con habilidades similares a las de cualquier aeronave moderna.
Hay una criatura, conocida como Vímana, que puede desencadenar un destello de luz si se apunta a algo; la luz es tan fuerte que hará desaparecer cualquier cosa a la que se dirija.
Las increíbles características de este arma de láser hacen pensar que se trata de una historia de ciencia ficción antes que un mito religioso. Sin embargo, la sociedad moderna en India acepta como verdaderos todos estos relatos.
Si se tiene en cuenta lo ocurrido en el pacifico con el «culto cargo» se pueden encontrar similitudes en la India con los vimanas, la primera imagen es el supuesto aspecto de un Vimana y la segunda los templos indues, claramente hay un parecido con el intento de las tribus del pacifico de replicar lo que vieron y no pudieron entender.
Estas narraciones que fueron escritas en la antigüedad, se ven reflejadas actualmente en los avistamientos de OVNIS. Es posible que estemos frente a sucesos reales que fueron descritos por los autores de aquella época
Diferentes evidencia arqueológicas, entre ellas la existencia de pinturas y tallas en roca que se han encontrado por todo el mundo, pueden ser una prueba para demostrar la llegada de antiguos cosmonautas a la Tierra. Estas figuras representan a los supuestos astronautas con su casco en bobinas grutas y simbolizan claramente su presencia. ¿Quién más podría ser sino extraterrestres?
Se han encontrado numerosas construcciones en Colombia que llevan consigo elementos que parecen pertenecer a los aviones modernos. Tenemos alas, una figura de fuselaje y esa aleta de cola hacia arriba característica solo de la aerodinámica contemporánea. Así que, ¿será que nuestros antepasados vieron algo semejante volando por el cielo?
Uno de los objetos más interesantes que se pueden admirar en el Museo de Estambul es una figura humana sentada sobre un vehículo espacial, todas sus partes están conectadas a diferentes artilugios y usando un uniforme aerodinámico. Es evidente que este extraño ser proviene desde algún lugar del espacio exterior.
Los seres humanos de hace mucho tiempo trataron de entender lo que estaban viendo, utilizando los límites culturales y sus propias fantasías. Lo interesante es que incluso si estas sociedades estaban muy separadas geográficamente, todas comparten una misma experiencia única sobre el encuentro con extraterrestres.
Muchos se preguntan qué o quién es el dios al que creen sin tener verdadera conciencia de ello, y algunos piensan que podrían ser extraterrestres. ¿Que significaría entonces para ellos la diferencia entre lo celestial y lo alienigena Hay muchas leyendas a nivel mundial sobre la inminente llegada de las antiguas deidades, y si eso sucede, entonces ¿cuánta gente los venerará como hacían en el pasado? Es muy probable que sea así.
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