
Durante la Segunda Guerra Mundial , el desarrollo de las armas nucleares fue uno de los principales objetivos por ambos bandos. Es mundialmente conocido el Proyecto Manhattan, desarrollado por Estados Unidos para crear la bomba atómica. Importantes físicos de todo el mundo participaron en él, entre los que se encuentran algunos tan famosos como Fermi , John Von, Neumann, Oppenheimer o Feynman. Muchos de ellos tenían parientes judíos y no tuvieron otra opción que alejarse de los alemanes, teniendo como opción más segura instalarse en Estados Unidos y colaborar en este proyecto. Pero,¿a qué se dedicaron los nazis? ¿tuvieron ellos también un proyecto nuclear?
Lo cierto es que sí, ellos también intentaron crear armas atómicas para superar tecnológicamente a Estados Unidos. Sin embargo, la Alemania nazi no llegó a desarrollarlas a tiempo y los estadounidenses se adelantaron con las famosas Fat man y Little Boy. La lucha por conseguir las armas atómicas antes que el bando enemigo fue una de las obsesiones de ambos países durante la guerra, y estaba claro que, por parte de un bando u otro, las armas nucleares se acabarían desarrollando. De hecho, ese fue siempre uno de los mayores argumentos de los científicos que trabajaban en el proyecto Manhattan, ya que si los nazis ganaban podrían haber dominado al mundo entero. En palabras de Albert Einstein:
“Nosotros ayudamos a construir la nueva arma para impedir que los enemigos de la humanidad lo hicieran antes, puesto que dada la mentalidad de los nazis habrían consumado la destrucción y la esclavitud del resto del mundo”
Sea como sea, los alemanes se quedaron atrás. Su propuesta nuclear, el Proyecto Uranio, no consiguió resultados lo suficientemente pronto. Y no fue precisamente por falta de científicos: Entre sus filas estaban Werner Heisenberg, Otto Hahn o Max von Laue. Quizás fue sólo cuestión de suerte, o quizás los físicos que trabajaban para los alemanes tuvieron algo que ver: Conocían el gran peligro que sería poner en manos de los nazis un arma de este calibre, y podrían haber sido los responsables de la victoria estadounidense. Es algo que probablemente no se podrá saber nunca con seguridad, pero no son pocas las pistas que afirman que los científicos intentaron retrasar a propósito el desarrollo de las bombas atómicas alemanas.
Todo empezó en 1938, cuando el físico Werner Heisenberg (conocido principalmente por sus avances en la física cuántica) acepta dirigir el proyecto nuclear nazi. Se encargó del desarrollo de un reactor nuclear junto a Otto Hahn, ya que el Proyecto Uranio tenía dos objetivos: El desarrollo de la energía nuclear para objetivos civiles y el uso de ésta para fines militares.
Mientras transcurrían estas investigaciones, en septiembre de 1941, Heisenberg hizo una visita al gran físico Niels Bohr. Bohr vivía en Copenhague bajo un importante peligro: Su madre era judía. Visitándolo, Heisenberg corría un grave peligro y podía ser denunciado por traición. Sin embargo, se arriesgó y viajó hasta la casa de Bohr para mantener una conversación con él. Ahora bien, ¿de qué hablaron en esa conversación? No tenemos demasiados datos, pero evidentemente hablaron sobre el proyecto de energía nuclear alemán. Heisenberg le habló de todas sus investigaciones e incluso le dibujó el reactor en el que estaba trabajando. No tenemos muchos detalles más, ya que esa conversación era algo prohibido y completamente ilegal para Heisenberg, estaba arriesgando su vida.
Hay quien propone que Heisenberg quería convencer a Bohr para trabajar en el proyecto alemán, pero esa es una idea más bien ridícula: Pensar que los nazis le iban a otorgar a un hijo de una judía el desarrollo de su tecnología nuclear es bastante ilógico. La idea más acertada es que ambos físicos hicieron un pacto para que el desarrollo de las bombas atómicas se detuviera todo lo posible y que, con suerte, la guerra se acabara antes que las investigaciones sobre la energía nuclear.
¿Estaba Heisenberg de verdad fallando a propósito en sus investigaciones para los nazis? Por desgracia, no hubo ningún testigo de la conversación entre ambos físicos, y parece que ninguno de los dos estaba dispuesto a revelar su conversación. Sin embargo, Heisenberg y otros físicos que trabajaron para los alemanes, como Max von Laue, afirmaron posteriormente que los motivos morales les obligaron a no construir con toda la rapidez posible la bomba atómica. Estas afirmaciones han recibido duras críticas por otros científicos que trabajaron en el Proyecto Manhatan, quienes aseguraban que los físicos alemanes estaban intentando desarrollar la bomba con toda la rapidez posible (es muy probable que estas críticas fueran lanzadas desde el sentimiento de culpabilidad de los estadounidenses por haber sido los responsables de las primeras bombas atómicas y de la destrucción que crearon).
Quizás os estéis preguntando porqué aceptó Heisenberg la responsabilidad de ser el responsable del Proyecto Uranio si en realidad no tenía ninguna intención de colaborar. La respuesta parece ser su interés por conocer el mundo atómico: El presupuesto y los medios que le proporcionaron los alemanes eran todo un incentivo para sus investigaciones y le permitían avanzar enormemente. Además, según esta teoría, así evitaría que otro físico más comprometido con los ideales nazis desarrollara la bomba con rapidez.
Esta última misión parece estar apoyada por una carta recibida por los estadounidenses en mitad de la guerra. Estaba escrita por el físico alemán Fritz Houtermans, y en ella afirmaba que “Heisenberg trata de retrasar el progreso del proyecto lo máximo posible, temiendo las catastróficas consecuencias del éxito”. Este detalle es algo demasiado aislado como para poder afirmar con rotundidad que Heisenberg estaba boicoteando el proceso, pero sin duda es algo a tener en cuenta.
Lo que sí sabemos es que Heisenberg y su equipo erraron con la cantidad de uranio necesario y la masa crítica que se necesitan para realizar una fisión nuclear. Estos fallos en los cálculos son uno de los principales indicios de manipulación por parte de los físicos para evitar una guerra nuclear, ya que, una vez acabada la guerra, los estadounidense hicieron un experimento revelador: La operación Epsilon.
Cuando el fin de la Segunda Guerra Mundial estaba ya cerca, los estadounidenses capturaron a los científicos que estaban trabajando para los alemanes. Entonces, los encerraron a todos juntos en una casa llena de micrófonos espías para poder saber hasta dónde habían llegado las investigaciones alemanas. Mientras permanecían en aquella casa, la bomba atómica de Hiroshima explotó. Ellos se enteraron mediante la radio y, a la noche siguiente de haberlo escuchado, Heisenberg les presentó a sus compañeros un estudio detallado de la cantidad de uranio que debían de tener las bombas atómicas, su diseño y su masa crítica. Sorprendentemente, Heisenberg se acercó bastante (aunque no con total exactitud) a la realidad, lo cual hace pensar que en su trabajo como físico nazi no hizo todo lo posible por desarrollar la bomba atómica. En sólo dos días, a partir de un informe de radio, Heisenberg se había acercado más a la verdadera solución que en todo el tiempo que había estado trabajando con los nazis.
Además de ese detalle, no se obtuvo ninguna respuesta más de esas grabaciones. Si bien es cierto que algunos físicos mostraron su alegría de que EE.UU venciera a Alemania en la carrera nuclear, otros lo lamentaron bastante, por lo que no hay resultados determinantes.
Además de ese detalle, no se obtuvo ninguna respuesta más de esas grabaciones. Si bien es cierto que algunos físicos mostraron su alegría de que EE.UU venciera a Alemania en la carrera nuclear, otros lo lamentaron bastante, por lo que no hay resultados determinantes.
Puede ser que Heisenberg se equivocara estrepitosamente en sus matemáticas y retrasara el desarrollo alemán, pero siempre existirá la duda. ¿Fue un fallo o una estrategia para evitar el terrible horror que surgiría si los alemanes ganaban la guerra? Quizás nunca lo sabremos con seguridad, pero Heisenberg siempre será reconocido como el responsable de que la bomba atómica nazi fuera sólo un proyecto inacabado.
Además de ese detalle, no se obtuvo ninguna respuesta más de esas grabaciones. Si bien es cierto que algunos físicos mostraron su alegría de que EE.UU venciera a Alemania en la carrera nuclear, otros lo lamentaron bastante, por lo que no hay resultados determinantes.
Proyecto manhattan Part1
proyecto manhattan part2